El rostro es una de las partes de qué más hablan de nuestra apariencia física y por eso en la persona lo sentimos como un cuidado especial en el que ponemos mucha atención en verlo siempre bien y mantenerlo de una forma en la que nos sintamos a gusto con nuestra apariencia.
Sin embargo los cambios del paso del tiempo hacen qué, en ciertas zonas, sean inevitables y que hablen por sí solas. Según van pasando los años los tejidos de la piel van perdiendo forma y empiezan a mostrar flacidez y desgastarse de forma natural a la vez que envejece. Para ello muchas personas buscar una solución rápida de tal forma que vuelvan a ver si bien. En esta parte del blog queremos hablarte de 3 cirugías específicas para rejuvenecer tu rostro.
Blefaroplastia
Esta cirugía es la encargada de devolver la juventud a la zona de los párpados. A través de esta cirugía mejoraremos considerablemente el aspecto de los ojos y eliminando tanto las bolsas de grasa y piel que se genera en las zonas superiores e inferiores del mismo.
Para realizar esta operación hacemos incisiones en la parte interior del párpado y de esta forma evitamos la creación de cicatrices de forma visible. Posteriormente extraeremos la grasa sobrante y eliminamos los tejidos qué supongan el deterioro de la estética del ojo y de la mirada general del paciente.
Rinoplastia
En este caso supone un término más común dentro de las operaciones de cirugía, por lo tanto es muy probable que ya sepas a lo que nos estamos refiriendo, operación de nariz. Con esta cirugía buscamos corregir la forma y proporción que tenga la nariz con el resto del rostro del paciente buscando una armonía general más estética bajo los parámetros que el paciente busca, de tal forma que tenga la satisfacción que siempre ha querido. Hoy en día existen muchos avances en cuanto y podemos incluso hablar de la rinoplastia ultrasónica.
Cómo acabamos de decir, no solamente ayuda a la estética sino que también puede suponer mejorar la corrección del tabique y acabar así con problemas respiratorios y evitar ronquidos.
Hilos Tensores
Ahora pasamos de operaciones mucho más tradicionales a comentar lo que sería una intervenciones moderna y actual, dentro de la cirugía estética. La aplicación de hilos tensores supone un procedimiento pensado para acabar con las arrugas de la cara y así evitar impactar por completo en la salud de cada paciente.
La técnica es muy sencilla, pero requiere de un profesional ya qué es delicada. Supone la inserción de una aguja por debajo de la piel del rostro, mediante la cual se logra el estiramiento de los músculos y estirar así los tejidos internos.
Este tipo de intervención no deja cicatrices ni marcas posteriores en el rostro además de que no requiere anestesia general. Posteriormente a la inserción de los hilos tensores el doctor Edgar Quintero recomienda un ligero reposo para, posteriormente a estos días, continuar con su día a día normal.